Tu perfeccionista interna es esa parte de tu interior que intenta a toda costa que lo hagas todo perfecto. Es esa vocecita que te dice que eso que después de tanto esfuerzo estás a punto de acabar “no es lo suficientemente bueno aún”.
A veces le da por decirte directamente que tú no eres perfecta o por lo menos no lo “suficientemente perfecta”, otras ataca tu comportamiento o tus creaciones. Aún puedes mejorar un poco más, puedes optimizarte, puedes comer mejor, hacer más yoga o meditar, puedes apuntarte a un curso o a una formación más. Siempre puedes verte un poco más guapa.
Lo que pasa es que hay una parte de ti que cree que no eres suficiente. Da igual cuanto lo intentes, nunca vas a ser lo suficientemente buena. Esto supone una fuente de constante frustración y ansiedad, a veces de manera muy inconsciente.
¿Te reconoces en las siguientes características?
🪆 Tienes estándares extremadamente altos para ti misma.
🪆 Intentas al máximo dar lo mejor de ti misma, por lo que es posible que por ejemplo realizar proyectos o presentaciones en público te produzca mucha ansiedad.
🪆 Eres muy dura contigo misma, pensando que tus esfuerzos nunca serán lo suficientemente buenos como para alcanzar lo que quieres. Tus intentos son “estúpidos“, “vagos” o “de muy mala calidad”.
🪆 Da igual que los demás te digan lo bien que lo has hecho o lo maravillosa que eres, para ti una cosa siempre está clara: “podría haber sido mejor”.
Déjame que te cuente el quid de la cuestión:
Por difícil que resulte de creer, tu perfeccionista interna tiene una función muy clara:
Protegerte.