La controladora interna es esa parte de tu interior que necesita estar al volante y hacerse cargo de todo lo que ocurre a su alrededor. Esta necesidad de control es una fuente constante de ansiedad, muchas veces de forma inconsciente. Intentar estar siempre al mando le crea ansiedad. Aceptar que las cosas no siempre salen como quiere, también le crea ansiedad.
Esta parte de ti misma tiene mucha energía y si consigue estar al control es muy potente y a veces consigue retos que parecían imposibles. También es muy impaciente. Impaciente contigo misma si las cosas no te salen como quieres o con las personas que tienen otros intereses, ritmos o estilos para lidiar con la vida. Ahí comienzan las críticas que a veces pueden llegar a ser realmente intimidantes.
La controladora interna es dura de pelar y suele sorprenderse cuando otras personas se sientes lastimadas por ella, lo cual suele ocurrir porque la verdad, es que esta parte de tu interior tiene la tendencia a empujarte a ti misma y a los demás fuera de la zona de confort y en ocasiones de los límites saludables.
Para la controladora interna hay dos modos: tienes el control o no lo tienes. Si lo tienes, la vida puede ser genial. Solo necesitas esforzarte lo suficiente y las cosas saldrán como quieres. Pero si no lo tienes…aquí las cosas se ponen feas. Mucho miedo e inseguridad, por lo general inconscientes, disfrazados de todo tipo de emociones como el enfado o el mal humor o sentirse herida o rechazada.
En general, es dificil darse cuenta de que la controladora interna es la raíz de muchos de nuestros problemas. Solemos aferrarnos mucho a sus promesas, nos creemos que sin esta parte no podríamos lograr mucho y nos inventamos mil y unas justificaciones para convencernos a nosotras mismas de que necesitamos a nuestra parte controladora al mando.
¿Te reconoces en las siguientes características?
🪆 Cuando las cosas no salen como quieres puedes llegar a ser muy impaciente.
🪆 Eres bastante competitiva. Se podría decir que los conflictos o desafíos te motivan.
🪆 No te gusta cuando otras personas te dicen lo que tienes que hacer.
🪆 Te suele pasar que sientes que a la gente a tu alrededor le ayuda que tomes el control, organices por ellos o ellas y les digas que es lo que deberían hacer.
Déjame que te cuente el quid de la cuestión:
Por difícil que resulte de creer, tu controladora interna tiene una función muy clara:
Protegerte.