Cuando era niña aprendió: "Si eres perfecta, lograrás la atención que siempre quisiste".
Indra aprendió a creer que la perfección era la clave para conseguir la atención que tanto anhelaba. Sin embargo, su obsesión por ser perfecta esconde una triste realidad: es solo una máscara para ocultar su miedo a los juicios ajenos.
Buscando la perfección, Indra encuentra una sensación temporal de alivio y seguridad. Sin embargo, la constante presión de intentar hacerlo todo perfecto, a la larga la asfixia y limita.